Todos los días practico un rato con el bombardino, bueno, esto no es cierto, “casi” todos los días practico un rato con el bombardino y cuando no lo hago le dedico unos minutos a un software de notación musical que me ayuda a entender cosas a base de repeticiones, pruebas y errores.
Ayer, martes dos de enero de 2024, indico la fecha ya que este blog no deja de ser una especie de diario motivacional, después de mi clásica practica con el instrumento: calentamiento > tarareo > boquilla > instrumento de la pagina del libro que me tocaba y viendo que me quedaba tiempo, miré las partituras de la parte de atrás del libro, concretamente una de la 9º sinfonía de Beethoven, obviamente simplificada para estudiantes, me llamó la atención y me decidí a intentarlo.
La interpreté de corrido, es decir, pude leer la partitura sin parones y salvo que, las notas no me salían muy puras, a veces los tempos no los respeté e incluso una ligadura re-sol que he sido incapaz de hacer, quedé bastante satisfecho.
Para mi esta ligadura es complicada
Me vine arriba y probé varias partituras. Creo que mi mente ha hecho un click, salvo excepciones no pensaba, leía, con fallos claros, pero leía. Me grabé a mi mismo para escuchar la interpretación y para ser sincero me acordé del chiste del pianista horroroso:
- ¿Qué le parece la ejecución del pianista?
- La ejecución me parece un poco fuerte, pero dos ostias si se merece.
Pero lo importante es que pese a que me faltan horas de practica y estudio, la notación musical ya no me da miedo, no deja de ser un idioma y si tardé 2 años en decir correctamente "My tailor is rich" creo que en unos años podré leerlo e incluso escribirlo.
Comentarios
Publicar un comentario